11.9.06

Ruth y Jackson

Continuando con la serie de posts relatando las biografías de los miembros del Salón de la Fama, esta semana nos toca conocer un poco más sobre las vidas del legendario Babe Ruth, el Bambino, y de Travis Jackson, un campocorto que jugara en la Nacional en los años 20 y 30

Babe Ruth - 1914-1935

Nació: 6 de febrero de 1895, Baltimore, Maryland, USA
Falleció: 16 agosto de 1948, New York, New York, USA

George Herman Ruth y su esposa Kate tuvieron un total de ocho hijos, pero solo dos de ellos lograron sobrevivir más allá de la infancia. Una fue su hija Mamie, el otro, su hijo George Herman jr., quien se convertiría en el personaje más famoso de las historia de las Grandes Ligas

El Sr. Ruth trabajaba en una taberna, pero como los tiempos eran difíciles, se vió en la necesidad de dejar a su hijo en un internado católico administrado por estrictos religiosos, los hermanos Javieranos. Fue en ese colegio donde George Jr. conocería el béisbol

Cuando Ruth tenía 19 años, Jack Dunn, el dueño de los Orioles de Baltimore (en esa época, un equipo de ligas menores) lo vió jugar y lo firmó en el acto. En menos de seis meses ya se encontraba en el equipo grande, los Medias Rojas de Boston, y fue así como obtuvo el sobrenombre que le seguiría el resto de la vida: cuando los demás peloteros vieron al jovencito de menos de 20, lo comenzaron a llamar "el nuevo bebé (Babe) de Jack" Dunn. Con el tiempo, terminó siendo solo "el bebé" (The babe)

A pesar de que todo el mundo lo recuerda como uno de los bateadores más temidos de la historia, no todo el mundo sabe que Ruth comenzó siendo pitcher -- y lo que es más, era uno de los mejores que se hayan visto. En total tuvo marca de 94-46, con una excelente efectividad de 2.28 en 1221.1 entradas lanzadas entre 1914 y 1921 (aunque tuvo un par de apariciones en la lomita en 1930 y 1933)

Tanto era su talento como pitcher, que incluso mantuvo por 43 años la marca de más entradas consecutivas en juegos de Serie Mundial sin permitir anotaciones, con 29.2 innings. Adicionalmente, aún tiene la marca al partido completo más largo en la historia del clásico de octubre, con los 14 innings que pitcheó en el cuarto juego de la serie del 1916 frente a Brooklyn

Pero así como era bueno lanzando, también comenzó a destacarse con el madero. En esa época los lanzadores de la Liga Americana todavía bateaban (no existía el bateador designado). En 1918 los Medias Rojas lo comenzaron a usar como outfielder en los días en los que no lanzaba, y los resultados fueron asombrosos -- lideró la liga en jonrones, slugging y extrabases. A partir de ese momento, los días de Babe Ruth, el lanzador, habían llegado a su fin

A partir de 1919 y prácticamente hasta el día que se retiró, Ruth tuvo una de las carreras más descomunales que se hayan visto de bateador alguno. No solo rompía récords, los destrozaba. En más de una ocasión conectó más jonrones que cualquier otro equipo de la liga. Fue el primer jugador en la historia en conectar 200, 300, 400, 500, 600 y 700 jonrones. Sus proezas con el bate eran legendarias y lo hacían el bateador más temido de la época (y quizás de la historia), al punto de liderar su liga en bases por bolas un total de once veces (más dos oportunidades en segundo lugar)

Fue justo después de la temporada del 19 que Harry Frazee, el nuevo dueño de los Medias Rojas de Boston decide venderlo por $100.000 a los Yankees de New York, en lo que muchos consideran el peor cambio de la historia. Después de ese año, los Medias Rojas, quienes habían ganado cinco de las primeras 17 Series Mundiales, no volverían a ganar un título hasta el 2004, mientras que los odiados Yankees obtuvieron 26, comenzando en 1923

Así como eran de leyenda sus hechos dentro del campo, igualmente llamativas y coloridas eran las que realizaba fuera de el. Ruth era conocido por su enorme apetito, no solo por la comida, sino por la vida. No paraba de asistir a fiestas y banquetes, de los que solía ser el invitado de honor. No reparaba en consejos y hacía lo que le daba la gana, viviendo envuelto en excesos de todo tipo: comida, alcohol, tabaco y mujeres eran sus vicios

Pero como a todo pelotero, la edad comenzó a tocar la puerta de Ruth. El deporte estaba cambiando y ya no era el solo quien conectaba enormes cantidades de vuelacercas o impulsaba todas las carreras. Sus piernas comenzaron a fallar y su defensa, que nunca fue muy buena, comenzó a empeorar. En 1935 regresó a Boston, pero esta vez a los terribles Bravos, quienes lo habían engañado ofreciéndole la posibilidad de dirigir el equipo, cuando en realidad solo buscaban a un fenómeno para aumentar la venta de entradas

En el otoño de 1946 se le diagnosticó cáncer en la garganta. No pasarían más de dos años hasta que el 16 de agosto de 1948 falleciera George Herman Ruth, el Bambino, en un hospital de la ciudad de New York a los 53 años de edad

A 70 años de su retiro, aún sigue apareciendo en los primeros lugares en muchas categorías ofensivas, como jonrones, empujadas, anotadas, boletos, hits, promedio de bateo, slugging, OBP y OPS

Cuando se inauguró el Salón de la Fama en 1936 (el edificio donde está el museo actualmente no fue construido sino hasta 1939), la primera votación seleccionó a cinco peloteros como los primeros elegidos para ser parte del recinto de inmortales del deporte. De los 226 votantes, 215 consideraron a Ruth digno de este honor, y lo eligieron junto con otras luminarias del deporte como Ty Cobb, Walter Johnson, Christy Mathewson y Honus Wagner


J ABH2B3BHRCACE
2.5038.3992.8735061367142.1742.213

BBSOBR.AVG.OBP.SLG.OPSOPS+
2.0621.330123.342.474.6901.164207



Travis Jackson - 1922-1936

Nació: 2 de noviembre de 1903, Waldo, Arkansas, USA
Falleció: 27 de julio de 1987, Waldo, Arkansas, USA

Travis Jackson es uno de esos casos en los que la presencia en el Salón de la Fama se debe más a la pólitica y las influencias que a los méritos reales del pelotero

Jackson comenzó a jugar con los Gigantes de New York a finales de 1922, subiendo justo a tiempo para ver al equipo ganar el banderín de la Liga Nacional. Luego jugó con el equipo hasta el final de su carrera, en 1936, año en el que coincidencialmente también quedaron campeones del viejo circuito. En el medio, Jackson acompaño a los Gigantes a tres Series Mundiales más

Nunca fue considerado como una verdadera estrella, aunque para muchos siempre fue un gran jugador y particularmente bien visto por sus compañeros, incluso llegando a ser nombrado capitán de la divisa

Su mejor temporada vino en 1929, cuando conectó 21 dobles, 12 triples y 21 cuadrangulares, a la vez que lideraba la liga en fildeo -- cosa rara, porque nunca fue considerado excepcional con el guante (curiosamente lo apodaban 'la pared' por su supuesta habilidad al fildear, cosa que no era más que la percecpión errada de sus compañeros). Aunque en ese año no conectó para .300 (.294), en otras seis ocasiones si lo logró hacer, incluyendo una marca de .339 en 1930

Tampoco era alguién que gozara de muy buena salud, jugando en más de 140 partidos apenas en cuatro ocasiones en su carrera de 15 años. De hecho, su retiro en 1936 vino al no poder recuperarse completamente de sendas operaciones en las rodillas para reparar cartílagos dañados. Apenas tenía 32 años de edad cuando dejó de jugar

Jackson nunca gozó de mucho apoyo en las votaciones para el Salón de la Fama. Apareciendo en la boleta desde 1948 y hasta 1962, la mayor cantidad de votos que recibiera fue de 14 en 1956, buenos para un pírrico 7.25%. Sin embargo, en 1962, fue electo por el Comité de Veteranos -- mismo que convenientemente era encabezado por Frankie Frisch, ex-estrella de los Gigantes y de los Cardenales de St. Louis, quien utilizó todas sus influencias para ver electos a muchos de sus compañeros de equipo, merecedores o no de este honor, incluyendo al propio Jackson

Contar a Jackson entre los inmortales del deporte es una verdadera desgracia, ya que no merece este honor, mientras otros peloteros se encuentran fuera de este recinto con muchos más méritos. Lamentablemente, no podemos retirarle este honor, ni nos sirve como base para comparar a otros peloteros para determinar si tienen ellos la oportunidad de entrar o no, ya que su caso, si bien no es único, es particular y esperemos que también sea irrepetible

Sus numeritos ofensivos son de los más bajos para cualquier bateador que se encuentre en Cooperstown

J ABH2B3BHRCACE
1.6566.0861.76829186135833929

BBSOBR.AVG.OBP.SLG.OPSOPS+
41256571.291.337.433.770102

La semana que viene conoceremos un poco más sobre Hank Aaron y Red Ruffing



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